Os camiños do AVE



Este pasado fin de semana, en varios artigos, analizábase a chegada da AVE a Galicia e mais concretamente a Ourense. En Diario La Región, o xornalista Francisco J. Gil, ante estas dúbidas escribía que “todavia non hai resposta para esa pregunta (...). As previsións fixaban para os 110 quilómetros de Zamora a Pedralba que a obra estivese concluída antes de terminar 2018 e as probas en 2019, de maneira que nalgún momento do segundo semestre deste ano empezasen a circular os primeiros trens Alvia a 250 quilómetros por hora desde Olmedo até Pedralba de la Pradería. Pero a día de hoxe faltan aínda por realizar todas as probas de circulación a máis de 200 quilómetros por hora, co seu correspondentes test de auscultación dinámica de vía e catenaria, así como as do ERTMS. Que o tren Séneca tivese que pasar polo taller non é xustificación para un atraso. Adif xa contaba con esa continxencia e contratara a Renfe o servizo de auscultación das vías de alta velocidade cun tren de alta velocidade de uso comercial equipado co instrumental necesario para que esas reparacións non supuxesen un atraso nos plans do administrador ferroviario. Se como parece esas probas terminan a finais deste ano, Ourense estará a pouco máis de tres horas e media de Madrid a partir de xaneiro de 2020 e a dúas horas e media, ou e cuarto, segundo Ábalos, a partir de xaneiro de 2022”. 

Se a estas dúbidas, preguntas e respostas xuntamos un razoamento que escoite dicir a Sergio del Molino nunha charla literaria en Allariz, unha charla que viraba ao redor do seu libro “La España Vacía” e onde, nun determinado momento a raiz dunha pregunta que se lle fixo, o escritor madrileño dijo que moitas veces, a gran maioría das veces, as infraestruturas como o ferrocarril serven, non para traer máis xente a zonas baleiras e se como medio para escapar delas. 

Unindo estes dous temas: a chegada do Tren/AVE, as posibilidades e expectativas que se esperan del e o que a realidade finalmente depara, acordeime dun articulo de El Progreso de Lugo, de 15 de junio de 1957, onde se relata a chegada do ferrocarril (co seu paso por estacións ás que se lle mantén o “enxebrismo” dos seus nomes, como ocorre coa de Taboadela) e das esperanzas que nel se depositaron 

Hoxe, a realidade tristemente vemos que nos levou por outro camiño. ¿Será o mesmo camiño polo que nos leve, máis rapidamente, o AVE? 


El Progreso, 15 de junio de 1957





Un futuro mejor (Progreso, 1957 - A. Amieiro López)

El día 16 de abril pasado, toda la Prensa nacional daba la esperada y grata noticia de que el ferrocarril Zamora-Orense había sido puesto en servicio. 439 toneladas de artículos facturados a Zamora y estaciones siguientes hasta Madrid, Ilenaban las 26 unidades del mercancias número 8.641, arrastradas por máquina de fuel-oil 141-F. 2.390, que en su partida colmó de júbilo al pueblo orensano y abrió una justificada esperanza de revalorización a los productos que la provincia exporta. 

Para dentro de breves dias, se anuncia la inauguración oficial de esta importantísima línea férrea que tanto beneficiará a Galicia entera, y sobre todo a la montuosa y fértil provincia orensana que tendrá comunicados todos sus rincones mediante la estupenda situación de las estaciones que desde Puebla de Sanabria hasta Orense capital suman dieciséis y mantienen el «enxebrismo» de sus nombres sin modificaciones tan al uso en la actualidad. Son éstas: Pedralba, Requejo, Lubián, La Mezquita, La Gudiña, ViIlarino do Couso, Castrelo del Valle, Laza-Cerdedelo, Albergueria- Prado, Villar del Barro, Baños de Molgas, Paderne-Cantaña, Taboadela, Orense-San Francisco y Orense-Empalme. 

Este esperedo camino de hierro, planeado hace cerca de medio siglo, recorrerá pronto el partido judicial de Viana del Bollo, parte del de Verín, el de Allariz, el de Orense y el de Carballino; y es obra realizada con un enorme sentido práctico y estético. Sus puentes y viaductos son de piedra y hormigón armado-éste donde la pie-dra no pudo emplearse-. Las estaciones encajan, lo mismo su estilo que su decoración, en el verde paisaje gallego, ya que se ha sabido completar la belleza y el tipismo con la utilidad. Hasta el modelo de las casetas de los guardas, es de lo más acertado. 

En toda la línea no existe ni un sólo paso-nivel, lo que evitará múltiples accidentes y desgracias. 

Desde ahora el ritmo de industrialización y explotación del suelo y el subsuclo de esta provincia será más acelerado, ya que las comuniones lo implican. Y, quizá el fe- nómeno de la imigración tan pródigo en nuestra tierra y sobre todo en Orense, pueda sor contenido mediante la lógica revalorización de los productos y de una mayor producción que retenga los brazos, seguros de una justa recompensa, haciendonos olvidar la expresión de tristeza que la inmortal poetisa nacional, nuestra Gran Rosalia de Castro vertió en su poema: «Pr'a Habana», que dice: 

Este vaise y-aquil vaise 
E todos, todos se van 
Galicia sen xente quedas 
Que te poidan traballar. 

La inauguración de esta línea, pues, y el proyecto de obras por más de 32.000.000 de pesetas, -aprobadas- que dentro de un par de meses iniciarán en la ciudad orensana, así como ed inminente cubrimiento del río Barbaña, para lo cual ya tiene orden de redactar el oportuno estudio el ingeniero-director de los servicios hidráulicos del Norte de España, son motivos más que suficientes para que el pueblo de Orense sienta una alegría y una satisfacción tan abiertamente cordial como su carácter.

Comentarios